CONTRIBUCIÓN
La Fundación para el Ecodesarrollo y la Conservación (FUNDAECO) es una organización no gubernamental sin ánimo de lucro legalmente constituida en 1990 con el fin de conservar la naturaleza, recuperar el ambiente, valorizar, reconocer y apoyar a los pueblos y culturas tradicionales que viven en armonía con su entorno, y promover formas de vida dignas, sostenibles y equitativas para las presentes y futuras generaciones de guatemaltecos.
Desde su creación, FUNDAECO ha luchado por conservar los últimos bosques del Caribe Guatemalteco, entre las fronteras de Belice y Honduras, una región con altos niveles de pobreza rural y una realidad social y catastral compleja. Con una sorprendente diversidad biológica y altos grados de endemismo, estos bosques son vitales para la conectividad ecológica del Corredor Biológico Mesoamericano.
FUNDAECO ha desplegado un esfuerzo integral para el establecimiento de una red de áreas protegidas en el Caribe guatemalteco que garantice la protección de la biodiversidad y la reducción de la pobreza rural a escala regional.
Este esfuerzo ha incluido las siguientes estrategias: diseño y declaratoria de áreas protegidas por el Organismo Legislativo (dos áreas declaradas y dos más propuestas); compra de tierras para protección (9 Reservas establecidas; 7,000 hectáreas protegidas); establecimiento de Reservas Municipales y Comunitarias (6,000 ha protegidas); promoción de alternativas agroecológicas (reforestación, pimienta orgánica, frutales, abonos verdes); y gestión de incentivos forestales del Estado para la protección de bosques (15,000 hectáreas). Se ha desarrollado también una labor pionera de legalización de tierras comunales indígenas dentro de áreas protegidas (10,000 ha legalizadas), para estabilizar la frontera agrícola y construir alianzas de trabajo. FUNDAECO también ha promovido esquemas participativos de manejo de áreas protegidas, para incorporar y asignar responsabilidades directas de manejo a los actores locales. Paralelamente, se han ejecutado importantes investigaciones biológicas, incluyendo el más largo Programa de anillado y monitoreo de aves residentes y migratorias de Mesoamerica (15 años de monitoreo ininterrumpido; 25,000 aves anilladas).